Sistemas para alargar el uso de las piscinas todo el año

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Una vez tratado y comentado la climatización de piscinas para usuarios que solamente quieren ampliar la temporada de baño, vamos a tratar la climatización de piscinas para utilizarlas durante todo el año.

USAR PISCINAS DE OBRA EXTERIORES TODO EL AÑO 

Cuando tenemos una piscina en el exterior, dependemos mucho de la ubicación de la piscina. No es lo mismo pretender usar la piscina todo el año en zonas templadas como la costa levantina o andaluza, que pretender usar la piscina todo el año en zonas como el noroeste de la península o la zona central, donde el salto térmico durante la noche, puede oscilar entre 6 a 10 grados de temperatura.

En la zona mediterránea (desde Cataluña a Cádiz), y en la zona de Andalucía, es posible utilizar la piscina, aunque sea de exterior, todo el año; basta con tener una cubierta de tipo telescópica o fija, acristalada y una bomba de calor de todas las estaciones, es decir, las que pueden trabajar con temperaturas exteriores de, hasta -8º.

Para evitar que la humedad relativa del aire sea superior al 60-70%, deberemos instalar un deshumidificador bien dimensionado y si le ponemos una cubierta, bien de burbujas o automática, evitaremos que la condensación empañe los cristales y se produzca en el interior el “efecto lluvia”.

En el resto de la península, para utilizar la piscina durante los doce meses del año, es imprescindible que la piscina esté en el interior de la vivienda y, para climatizarla, deberemos dotarla de una instalación muy bien dimensionada, teniendo en cuanta el volumen de la sala donde se encuentre la piscina, la orientación y los metros cuadrados de acristalamiento.

USAR PISCINAS DE OBRA INTERIORES TODO EL AÑO 

En primer lugar, la sala donde se encuentre la piscina de vemos calefactarla para que la temperatura de la estancia, sea entre 1 y 2 grados superior a la temperatura del agua. Lo ideal para calefactar la sala, es utilizar la misma calefacción que el resto de la vivienda, a ser posible suelo radiante.

Para calentar el agua, si en la zona donde esté ubicada la piscina, en invierno las temperaturas bajan por debajo de -8º, el mejor sistema es un intercambiador de calor de placas agua-agua, que funciona con la caldera de la vivienda y tiene un coste de instalación bastante reducido.

También podemos utilizar la bomba de calor de todas las estaciones (las que trabajas hasta -8º) en sitios donde la temperatura exterior, en raras ocasiones baje de 3-4 grados bajo cero.

Si la estancia donde se encuentre la piscina esta acristalada y queremos que estos no se empañen, deberemos instalar una central de deshumidificación y por medio de conductos de aire caliente, colocar rejillas en todas las cristaleras. Este aire caliente lo genera la propia central deshumidificadora y sirve de apoyo para la calefacción de la sala.

Es aconsejable dotar a la piscina de algún sistema que cubra la misma para evitar que la evaporación cree excesiva condensación.

Por último, deberemos dotar a la sala de un sistema de ventilación que renueve el aire, para evitar que exista oxidación por la condensación de cloraminas.

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HIDALGO Y RECIO, LES DESEA UN FELIZ VERANO